Este evento reunió a más de 30 personas de la familia Bewatt, quienes compartieron su amor por los skates eléctricos y vivieron una experiencia inolvidable juntos.
La quedada tenía dos propósitos emocionantes: primero, disfrutar de una ruta en skate eléctrico por la zona de Tres Cantos, y segundo, despedir a Evan, quien comenzaría su aventura en el Camino de Santiago sobre skate eléctrico al día siguiente.